MASTYRS

Uno de los pilares del horror francés que dio el país durante la primera década de este milenio, una generación de películas que tomó las riendas de la producción nacional de este género y que llegó a convencernos a muchos de que los galos sabían hacer cine extremo sin estar totalmente desligado de cierto tipo de contenido. Hablo de Haute Tension (2003), A l’interieur (2007), Frontiere(s) (2007), Horde (2009) y la que nos ocupa, producida en 2008

En Martyrs tenemos dos protagonistas. En la primera parte nos cuentan la historia de Lucie, una niña que fue descubierta corriendo asustada, demacrada, golpeada, deshidratada, por un polígono industrial, y donde había estado retenida largo tiempo. Su compañera de cuarto en el internado donde fue a parar se llama Anna, y después de salir del internado la sigue acompañando y cuidando.

Un día Lucia entra en una casa y se carga a toda la familia que vie alli ( con hijos y todo ) diciendo que son los que la torturaron de pequeña, Anna intentará poner sentido a la situación pero terminará metiendose en una espiral de locura y torturas de esas que te hacer decir: ¿pero que coño le pasa a estos gavachos?....